La selección argentina de básquetbol no logró revalidar su título en la AmeriCup, tras caer ante Brasil por 55-47 en la final disputada en el Polideportivo Alexis Argüello de Managua, Nicaragua. El equipo dirigido por Pablo Prigioni afrontó su cuarta definición consecutiva en este certamen, pero se quedó a un paso de repetir la consagración obtenida en 2022. Pese a esto, el entrenador se mostró muy orgulloso por la labor de sus dirigidos y la Confederación Argentina de Básquet subió un video en redes sociales en el que develó la intimidad del vestuario albiceleste.

En noviembre empieza la ventana para el Mundial… A mí me quita el sueño ir al Mundial con ustedes. Y espero que a ustedes también les quite el sueño ir al Mundial. Ahí es donde nosotros tenemos que apuntar”, les dijo Prigioni a todos sus dirigidos en el vestuario, en el recorte que subió en redes sociales la cuenta oficial de la CAB.

“La actuación individual de todos, de cada uno y como grupo, cambió el objetivo de la segunda etapa. Ya no era solo venir con un grupo joven y agarrar experiencia. Porque había nueve debutantes. Nueve de ustedes es el primer torneo de América que juegan, y se llevan este (mostrando la medalla obtenida). Obvio, a todos nos gustaría llevar el dorado, pero esto no es poco. No es poco lo que hicieron, así que valórenlo mucho”, prosiguió el entrenador del combinado nacional.

En esta misma línea, agregó: “Nuestro objetivo y el de ustedes tiene que ser el máximo, el techo, como hicieron en esta concentración. Es lo último que les pido”. Una vez finalizó su charla, todos los jugadores se reunieron en el centro del vestuario luego de la derrota para animarse y salir adelante de cara a los próximos torneos.

Esta misma actitud y pensamiento había dejado en claro Pablo Prigioni durante la conferencia de prensa protocolar tras la derrota. “Lo primero que me deja es que con estos chicos no te podés poner ningún techo. Es un grupo muy divertido para mí de trabajar. Nunca tenés que demandar esfuerzo, siempre están dándote todo lo que uno le pide. Pero sobre todo ver el crecimiento que tuvieron en estas cinco semanas”, analizó.

A esto, sumó: “Ellos han roto todas las expectativas. Estuvieron muy cerquita de llevarse el torneo, con lo cual la enseñanza es esa. Si encontrás un grupo que está dispuesto a esforzarse, trabajar, crear un equipo, no tiene límites. Pueden llegar a lugares que ni siquiera ellos se imaginaban”.

“Les acabo de decir a los chicos recién. En algún punto de la preparación, incluso en algún punto del torneo, ellos cambiaron un poco el objetivo del torneo y dijeron: ‘Está todo bien, está todo muy lindo, el desarrollo y la experiencia, pero queremos ir a ganar el torneo’. Y lo dijeron con sus acciones. Con la manera en la que fueron creciendo en su juego, individual y colectivamente. Nos vamos con muy buenas sensaciones, ojalá sea el puntapié para construir un grupo que siga representándonos”, concluyó Prigioni.

Argentina se quedó con la medalla plateada en la AmeriCup 2025 (REUTERS/Luisa Gonzalez)

Respecto al desarrollo del partido, estuvo marcado por una baja eficacia ofensiva de ambos conjuntos, lo que se reflejó en un marcador con pocos puntos. En el primer cuarto, la intensidad y el dominio en los rebotes ofensivos le permitieron a Argentina mantenerse en partido, con Gonzalo Corbalán capturando cuatro rebotes en los primeros seis minutos. A pesar de este esfuerzo, Brasil cerró el parcial inicial con una ventaja mínima de 16-15.

Durante el segundo cuarto, la diferencia en los rebotes se redujo y la baja efectividad en los lanzamientos persistió. Brasil logró mejorar levemente su puntería desde el perímetro, lo que le permitió ampliar la diferencia y llegar al descanso liderando 31-24. El análisis estadístico de la primera mitad evidenció que las pérdidas de balón fueron un factor negativo para Argentina, que acumuló ocho pérdidas frente a solo dos de la Verdeamarela. Además, el equipo brasileño dominó en robos, con seis contra dos.

En el inicio del segundo tiempo, Argentina consiguió un rápido parcial de 4-0 en poco más de un minuto, pero la reacción de Brasil fue inmediata. El conjunto dirigido por Petrovic endureció su defensa, encadenó un parcial de 9-0 y alcanzó una ventaja máxima de 40-28 en los primeros cuatro minutos y medio del tercer cuarto. A pesar de las dificultades para anotar, la selección albiceleste logró recortar la diferencia a 36-42 al finalizar el tercer período, gracias a la intensidad defensiva y al dominio en los rebotes ofensivos.

El último cuarto comenzó con un nuevo golpe de Brasil, que estableció un parcial de 8-0 en solo tres minutos y sacó la máxima ventaja de 14 puntos, colocando el marcador en 50-36. Argentina intentó una reacción en los minutos finales y, a 2 minutos con 30 segundos del cierre, logró acortar la diferencia a siete puntos. Sin embargo, tras una jugada revisada en la que Brasil retuvo la posesión, un triple de Vitor Benite terminó por sentenciar el ánimo del equipo argentino.

En las tres ediciones anteriores de la AmeriCup, Argentina había perdido la final ante Venezuela en 2015, caído frente a Estados Unidos en 2017 y vencido a Brasil en 2022. Para llegar a esta nueva definición, el equipo de Pablo Prigioni superó a Puerto Rico en tiempo suplementario durante los cuartos de final y derrotó a Canadá en las semifinales.