Laucha, el líder de la barra de Rosario Central

El presunto jefe de la barrabrava de Rosario Central Lautaro “Laucha” Fermín Ghiselli, allanado y detenido el pasado 13 de agosto, fue imputado en la tarde de este lunes junto con otros nueve presuntos integrantes de la banda narco Los Menores, estructura que se supone que mató a Andrés “Pillín” Bracamonte para quedarse con el liderazgo del paraavalanchas canalla.

Luego de varias horas de exposición de los fiscales Georgina Pairola y Luis Schiappa Pietra, el juez Fernando Sosa dispuso un cuarto intermedio hasta este martes a la tarde.

La investigación de la presunta asociación ilícita está centrada en, por ahora, 17 personas, de las cuales diez fueron sentadas en el banquillo de los acusados este lunes.

El líder, de acuerdo al legajo, de la organización criminal es Matías Gazzani, quien tiene pedido de captura. El gobierno provincial lo ubicó como el delincuente “más buscado” de Santa Fe y ofrece 60 millones de pesos por datos que conduzcan a su arresto.

Lautaro Ghiselli fue detenido en Rosario en el marco de 17 allanamientos simultáneos realizados por fuerzas federales y provinciales

Cuatro de los 11 imputados en la jornada fueron ubicados como presuntos organizadores o “segundas líneas”: Alejandro Miguel “Gordo Ale” Leguizamón, Ezequiel Sebastián “Menor” Dilascio, Lautaro Ghiselli y Matías Guerra.

El resto de los acusados fueron situados como presuntos miembros: Dylan Maximiliano “Sarampa” Bartozzeti, Diego Andrea “Ceja” Aguirre, Kevin Tomás “Hueso” De Los Santos, Mirko Nicolás Benítez –alias “Mirko Yedro”–, Lucas Ezequiel Medina y Germán Matías Hermosín.

Según explicaron los funcionarios judiciales, la presunta banda surgió en abril de 2020 en el barrio 7 de Septiembre, en la zona noroeste de Rosario, desde comenzaron a expandirse hacia otros puntos de la ciudad.

En sus inicios, de acuerdo a la teoría del caso, desplazaron a través del ejercicio de la violencia a dealers que respondían a Brian Emanuel “Negro Brian” Villalba, condenado como cabecilla de la organización del narcotraficante Julio Andrés Rodríguez Granthon.

Lisandro “Limón” Contreras, detenido en diciembre del año pasado en Tigre en un operativo de la Policía Federal

Para ampliar su zona de venta de droga al menudeo, los fiscales indicaron que Los Menores primero dominaron los barrios 7 de Septiembre, Stella Maris, La Bombacha y Emaús. Luego, tejieron alianzas con otras presuntas pandillas que operan en otras zonas para conseguir una consolidación en el negocio narco.

Por caso, con las estructuras lideradas por los reclusos Claudio Javier “Morocho” Mansilla –en los barrios Godoy y Santa Lucía–, Francisco “Fran” Riquelme –en Industrial y Ludueña–, Mauricio “Mauri” Ayala y Leandro “Gordo” Vilches –en Empalme Graneros y Parque Oeste, y Luis Lobos –en Bajo Cullen, Villa Nueva, San Francisquito y La Lata–.

Pairola y Schiappa Pietra señalaron que una vez que Los Menores consiguieron liderar sus territorios, Gazzani delegó la cadena de mando en sus segundas líneas y se mudó, primero, a Buenos Aires y, después, a Córdoba, donde lo buscaron semanas atrás en allanamientos con fuerzas provinciales.

Matías Ignacio Gazzani está apuntado por el crimen al ex líder de la barra de Rosario Central

Uno de los nombres que sobrevoló la audiencia también fue el de Lisandro “Limón” Contreras, detenido en diciembre del año pasado en Tigre en un operativo de la Policía Federal. Es quien, para los fiscales, proveyó al supuesto líder de Los Menores de contactos policiales y de recursos económicos.

Según el legajo, la presunta banda liderada por Gazzani tuvo, entre otros objetivos, el de poner a un referente propio en la conducción de la barrabrava de Rosario Central. Para ello, organizó el desplazamiento de Andrés “Pillín” Bracamonte, quien fue asesinado a tiros el 9 de noviembre del año pasado a metros de la cancha, el Gigante de Arroyito.

El designado por la estructura para ocupar su lugar fue Ghiselli, a quien le atribuyeron relación de confianza con distintos integrantes de Los Menores, con quienes administró los recursos provenientes de “negocios lícitos e ilícitos” del paraavalanchas canalla.

Sobre los otros presuntos organizadores, los fiscales indicaron que Ezequiel “Menor” Dilascio –cuyo apodo guarda relación con el nombre de la asociación ilícita– organizaba y participaba de balaceras en nombre de Matías Gazzani, a quien respondía directamente, por lo menos de manera clara, desde octubre de 2022 hasta abril de 2024, cuando fue detenido.

Otro nombre de peso para Los Menores, según el Ministerio Público de la Acusación, fue Alejandro Leguizamón, presunto gatillero que también organizaba los puntos de venta de droga y quien fue la cara visible de la estructura en el barrio 7 de Septiembre una vez que el líder se fue a Buenos Aires.

En tanto, los fiscales atribuyeron a Matías Guerra haber sido el encargado de regentear los búnkeres de la organización y reclutar vendedores para cada uno de los puntos de venta.

Una de las características ya conocidas de la pandilla de Gazzani era que utilizaba a menores de edad para diversas tareas, como la comercialización de droga o ataques a tiros. De allí también la relación entre el nombre asignado a la asociación ilícita, que en el barrio que surgió, además, tenía como “gerente” criminal a Ezequiel “Menor” Dilascio.