Alejo Ezequiel Moreno, ex oficial subayudante de la Bonaerense, es el otro detenido clave en el expediente que investiga el macabro crimen de Saúl Eduardo de Francesco, el jubilado de Zárate ejecutado de un tiro en la nuca la semana pasada a la vera de la Ruta 9. La otra es su pareja, la todavía policía de la misma fuerza, la sargento Florencia Ludmila Valentini.
Ambos fueron arrestados por la DDI de Zárate-Campana junto con sus dos presuntos cómplices en el crimen. Los cuatro esperan ser indagados por el fiscal del caso, Juan Manuel Esperante, que los acusa de los delitos de privación ilegítima de la libertad y homicidio agravado.
Valentini fue detenida en el Comando de Patrulla de Campana, donde cumplía funciones. Se le incautaron sus dos teléfonos y su pistola reglamentaria, que podrá ser peritada para saber si, efectivamente, fue el arma empleada para matar al jubilado.
Moreno, de 29 años, vecino de Zárate, que se negó a declarar en su indagatoria de esta mañana, ya no era policía hace tiempo. El 10 de junio de 2025, el Ministerio de Seguridad bonaerense resolvió cesantearlo por borrarse de su puesto en la Estación Comunal Parada de Robles desde el 31 de julio hasta el 22 de agosto de 2023. Enfrentado a una auditoría sumarial, Moreno no presentó un escrito de defensa ni ofreció pruebas para defender su situación.
Según confirmaron fuentes del caso tanto judiciales como policiales a Infobae, Moreno trabajaba en el Centro de Operaciones de Zárate (COZ), aunque la Municipalidad local no figura en registros consultados por este cronista como su empleador en blanco.
El Centro de Operaciones, punto neurálgico de la seguridad de la zona, publicó un comunicado este domingo a horas del hallazgo del cadáver de Saúl para solidarizarse con la víctima, mientras se desligaba de Moreno. El Centro de Operaciones, por ejemplo, concentra las cámaras de seguridad del municipio.
A horas de la indagatoria de Moreno, la inteligencia para cometer el crimen se vuelve una clave: fuentes clave en la causa confirman a Infobae que, en su viaje de 40 kilómetros para supuestamente ejecutar a Saúl, sus asesinos no pasaron por una sola cámara municipal. ¿Tenían la ruta estudiada? ¿Acaso Moreno, si es que es culpable, usó información privilegiada para la logística del crimen del jubilado?
“Los embocaron por las cámaras de privados”, asegura un investigador: “Particularmente, las cercanas a la casa de la víctima”.
Se cree que la pareja, si es que es culpable, mató a De Francesco por codicia: Valentini registra más de $4,5 millones en deudas recientes, según registros relevados por Infobae.
La mentira para cometer el crimen
El 17 de septiembre de 2025, cerca de las 16:00, Valentini se presentó en el departamento de De Francesco, ubicado en la calle Valentín Alsina en Zárate. Allí se identificó como nuera de un ex compañero de trabajo de la víctima de apellido Moreno. Intentó subirlo a su auto, mientras le contaba un cuento. Harían, en algún lugar de la zona, una fiesta en su honor. Saúl, sin embargo, se negó. Cuatro horas más tarde, de acuerdo a la reconstrucción de Esperante, Moreno, Lemos y Matencio Limache interceptaron a la víctima a pocas cuadras de su departamento y lo introdujeron en un Ford Focus gris sin patente trasera. Valentini iba detrás, en un Volkswagen Gol Trend blanco.
Condujeron hasta un descampado en la zona de Baradero, a 40 kilómetros de distancia del departamento de Saúl. Allí, supuestamente, lo ejecutaron de un tiro en la nuca. Antes de huir, le quitaron las llaves al cadáver todavía tibio. Luego, a las 23:30, volvieron a la casa de Saúl para revolverla. Sin embargo, oyeron ruidos en un departamento contiguo. Huyeron espantados.
El 18 de septiembre al mediodía, un día después, el hermano de la víctima, de 81 años, denunció su desaparición ante las autoridades.
El padre de Alejo Moreno, por su parte, dio su testimonio en la causa. Negó cualquier relación con los imputados, lo que derrumbó el discurso de Valentini. Las cámaras de seguridad fueron clave para acusarlos: en el expediente investigado por Esperante, existe un video en el expediente donde se ve a Valentini conversando con De Francesco